En el momento actual, el mercado de la energía de origen renovable en España ha alcanzado su grado de madurez óptimo.


El marco regulatorio ha consolidado la convergencia con las disposiciones de la Unión Europea y está perfectamente alineada con ella en la tendencia de potenciar y proteger la promoción de la generación de este tipo de energía.


En el ámbito económico, los precios de compraventa del mercado han alcanzado su punto de equilibrio y su evolución es previsible. Los contratos de compraventa de energía están muy definidos y se establecen sobre parámetros de precios y plazos seguros.


En España el mercado de la electricidad no está sujeto a primas; es gestionado por OMIE, donde los agentes compradores y vendedores contratan la potencia eléctrica que necesitan a precios públicos y transparentes. OMI-POLO ESPAÑOL gestiona de manera integrada los mercados, y su modelo de funcionamiento es el mismo que el de muchos otros países europeos.


En este escenario, el interés de los inversores en promover plantas de generación de energía fotovoltaica en España ha crecido significativamente, potenciado también por las siguientes condiciones:


La radiación solar en España, especialmente en el sur del país, es excelente, lo que permite unas horas de producción muy elevadas de la planta; esta circunstancia implica que los modelos económicos ofrezcan una rentabilidad estable muy atractiva.


Los técnicos especializados y las empresas constructoras españolas del sector son referente mundial por su capacidad tecnológica y su solvencia administrativa y técnica.


La implementación de las modalidades de producción con autoconsumo es un nuevo impulso para la elección por parte de medianos y grandes consumidores de la formalización de acuerdos entre el consumidor, la comercializadora, y el productor de energía fotovoltaica.


En este justo momento, el mercado demanda energía de origen renovable; por lo que después del duro tránsito del sector hasta alcanzar el grado de madurez en el que ahora se encuentra, se abre una nueva ventana de oportunidad en la que el generador de energía eléctrica fotovoltaica se sitúa en una posición privilegiada dentro del mercado.